La habitación donde Diego Armando Maradona pasó sus últimos días se convirtió, con el paso del tiempo, en la escena de una muerte que está siendo investigada por la justicia.
Ahora, casi cuatro años después, se reveló que ese lugar fue manipulado por alguien con el fin de borrar pruebas.
La denuncia sorprendió a todas las partes involucradas en el expediente y fue presentada por Rodolfo Baqué, el abogado de Gisella Dahiana Madrid, la última enfermera en atender a Maradona.
La enfermera espera el “juicio por jurados populares” por el presunto delito de homicidio con dolo eventual, pero el proceso sigue sin una fecha establecida, lo que genera la irritación en la defensa.
En las últimas horas, el abogado señaló que "se realizaron cinco audiencias al divino botón, porque todavía no se ha llegado a nada", y calificó de "autocontradictoria" la actitud de la magistrada por no tratar la teoría del delito, los hechos probatorios y la lista de testigos.
"Nos causa estupor. Sentimos que parece temerle a la fiscalía y a parte de los querellantes. Es un camino extraño el que tomó la jueza", agregó.
Incluso, según pudo saber A24.com, la defensa está evaluando pedir la recusación de la jueza y, eventualmente, elevar una denuncia a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por "la falta de respeto de la jueza y los fiscales".
Según la denuncia de Baqué, la jueza Coello ordenó que los fiscales entregaran toda la evidencia a la defensa y a las querellas.
Respecto a la presunta adulteración de pruebas, Baqué afirmó: “Las fotos tomadas en la casa de Tigre, donde Maradona se hospedó, demuestran cómo fue manipulada la escena de la muerte. Diego falleció a las 13 horas, pero no se logró documentar el estado del lugar hasta las 16 horas, momento en el que se muestra un cuarto completamente ordenado”.
Maradona murió el 25 de noviembre de 2020 en una casa alquilada en un barrio cerrado de Benavídez. El expediente fue elevado a juicio el 22 de junio de 2023 por el juez de Garantías de Tigre, Orlando Díaz.
La cama donde murió Diego Maradona.
“Puede afirmarse que cada uno de los imputados, desde el lugar específico que ocupaban en la configuración global del hecho, habría ejercido el condominio del mismo, decidiendo sobre su desarrollo integral a partir de las aportaciones realizadas por cada uno de ellos, esenciales para la concreción del desenlace fatal”, sostuvo el magistrado en su resolución de 236 páginas.
En abril de 2022, los fiscales Capra, Iribarren y Ferrari presentaron un dictamen en el que solicitaron que los ocho imputados sean sometidos a juicio oral y público por homicidio simple con dolo eventual.
Por el momento, el esperado juicio sigue sin fecha y continúa demorándose.
Fuente: Primicias Ya