Una candidata para el agite

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Detrás de la calculada movida que encabezaron la vicepresidenta Cristina Fernández y su hijo Máximo Kirchner, que incluyó un pedido de renunciamiento a Alberto Fernández y dejó en la dirigencia kirchnerista la sensación de lanzamiento de una candidatura presidencial de CFK, el peronismo bonaerense ve la necesidad imperiosa de encender el fuego militante y reconstruir algún tipo de épica para 2023, pero no ve, en una postulación de La Jefa, la garantía de triunfo ni mucho menos. En despachos importantes del conurbano reina el pesimismo: la tropa territorial piensa que la elección nacional está perdida, que la única luz en el camino es una mejora de la Economía que conduce Sergio Massa y que lo imprescindible es alambrar Buenos Aires, un plan que los intendentes y el jefe de La Cámpora pusieron en marcha en abril.

Un importante dirigente del Frente de Todos con asiento en el conurbano dijo a Letra P que, ante el complejo escenario electoral, la única opción en el horizonte es instalar la candidatura de la vicepresidenta, ya que, “como dijo Máximo”, hoy el peronismo “no tiene candidatos”. Cree -como muchos de sus pares- que es la única posibilidad de reconstruir la épica perdida por los fracasos del gobierno. “Cristina lo terminó de habilitar el viernes”, afirmó en referencia a la frase “voy a hacer lo que tenga que hacer” pronunciada desde el escenario de la UOM. Como sea, pone en duda que esa postulación se vaya a concretar.  

El clamor por Cristina Presidenta es alimentado por su círculo cercano, pese a que el jefe de La Cámpora dijo en la inauguración del ciclo Navarro con Todos, en El Destape, que no creía que su madre fuera a candidatearse el año próximo para buscar el regreso a la Casa Rosada. La intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, fogoneó el lema CFK 2023 desde sus redes sociales e incluso ya lo milita en los barrios del distrito. En la semana le dijo a un grupo de vecinos que necesitaban una presidenta, haciendo hincapié en el género, para marcar que hablaba de la vice, “que vuelva para solucionar los problemas” de la gente. La escena se repite en otros lugares y en encuentros con la militancia.

El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, y su ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque, también agitan: ambos cantaron el hit Cristina presidenta desde las tribunas del acto de la UOM. Se suman a una larga lista de dirigentes inaugurada hace meses por el jefe de Asesores de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bianco, cuando, en una entrevista con Letra P, disparó: “Mi candidata a la presidencia es Cristina”.

 Una posible candidatura de Cristina te da qué militar. Como dice ella, con los números en la mano se puede hablar de sus gobiernos, donde la gente vivió mejor. Además, sólo ella motiva a la militancia para salir a las calles con entusiasmo”, afirmó a este medio un intendente del conurbano.

En la misma línea, un dirigente K con asiento en la Primera sección electoral explicó que es necesario mantener a la vicepresidenta en el centro de la escena y construir desde abajo las condiciones para que, de ser necesario, sea una candidata competitiva el próximo año electoral; todo, siempre y cuando la economía en manos de Massa encuentre un rumbo. “Con esta inflación, no hay elección para nadie, ni para Cristina”, destacó la fuente

Como sea, con o sin Cristina candidata, en el peronismo bonaerense reina el pesimismo respecto del resultado de la elección nacional y la gran mayoría la da como una batalla perdida de antemano. Es en ese marco que parte de la dirigencia se cuestiona si, más allá del clamor necesario para atravesar el momento hasta que se definan las candidaturas, es conveniente que sea la vicepresidenta la que, efectivamente, le ponga el cuerpo y el nombre a lo que consideran una batalla con olor a derrota.

Ya le pedimos demasiado a Cristina. Pedirle que vaya a ponerle el cuerpo a una derrota, que quede sin fueros y que, luego, el macrismo vaya tras ella en la justicia, es demasiado”, afirmó a Letra P un dirigente del peronismo bonaerense que, si bien agita el operativo clamor y considera que es la mejor opción de la coalición oficialista, rechaza una postulación de la vice.

 En la misma línea, otros dirigentes consultados por este medio coincidieron en que para ir a una derrota es preferible hacerlo con otra figura, aunque sea del kirchnerismo duro, y que la vicepresidenta debe competir para renovar su banca en el Senado y buscar desde allí traccionar votos para Buenos Aires, el territorio que el kirchnerismo está obsesionado en retener.

La decisión final estará en manos de la vicepresidenta, quien tendrá una nueva presentación pública el próximo 17 de noviembre, con motivo del Día de la Militancia, en el Estadio Único Diego Armando Maradona de la ciudad de La Plata, donde será la única oradora.

Fuente: letrap.com.ar

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