Mauricio Macri le hizo un guiño al mano a mano Santilli-Ritondo

En su nuevo rol de garante de la unidad y organizador de los distintos intereses del partido que fundó hace más de una década y media, Mauricio Macri reunió este martes a la mesa bonaerense del PRO, a la que se sientan los principales intendentes amarillos, representantes legislativos y dirigentes que no gobiernan sus distritos y pretenden hacerlo. A lo largo de una hora y en una reunión a puertas cerradas en sus oficinas de Avenida Libertador, el expresidente, que 48 horas antes se había bajadado de la carrera por la Presidencia, hizo un guiño a la competencia interna tanto a nivel provincial como en las intendencias y, puntualmente, al mano a mano entre Diego Santilli y Cristian Ritondo, abanderados del team paloma y el team halcón, respectivamente, en el distrito del 38 por ciento del padrón electoral nacional.

Macri llegó con retraso a la cumbre prevista para las 11. Sus dos principales colaboradores y hombres confianza, Fernando de Andréis y Darío Nieto, fueron los encargados de apartar por un momento a Jorge Macri, en su rol de presidente del partido en la Buenos Aires, y a Cristian Ritondo y Diego Santilli, los dos principales candidatos a la gobernación, para hacerle saber que el exmandatario lamentaba la demora, pero que deseaba que lo esperasen; si hablaron de otra cosa, no trascendió. Lógicamente, nadie se movió de allí.

Según pudo reconstruir, en tono pausado y calmo le reiteró a la tropa dirigencial su nuevo mantra: unidad en la diversidad. Les pidió ser generosos en el armado de la estrategia electoral, no pensar en términos de ambiciones de poder y no dejarse llevar por los sesgos hacia alguno de los candidatos lanzados.

Esta última aclaración vino a propósito del sector alineado con Patricia Bullrich y Ritondo, que tienen cierta desconfianza en algunos jefes comunales alineados a Horacio Rodríguez Larreta. Puntualmente, la respuesta del exmandatario fue, por un lado, que el conjunto del partido debía ser respetuoso si un intendente o intendenta se inclinaba sobre uno de los dos, pero, a su vez, que estos mismos dirigentes debían evitar la confrontación o cualquier tipo de críticas contra el candidato nacional o provincial que no era de su preferencia. “Deben ganarse la confianza de todos los candidatos” presidenciales, les dijo. Pelea limpia, sin golpes debajo del cinturón.

Tres personas que estuvieron en la reunión y coincidieron en la lectura del mensaje: un guiño a la competencia interna con acuerdo tácito de no agresión. La fotografía final del encuentro intentó reflejar eso y si bien hubo algunas menciones internas posteriores que intentaron traducir las ubicaciones de los dirigentes alrededor de Macri en clave electoral, lo cierto es que la tomaron rápidamente por orden de Macri antes de que los diputados nacionales se fueran a la sesión prevista en el Congreso.
Además de Jorge Macri, Ritondo y Santilli, estuvieron Néstor Grindetti, otro de los candidatos a gobernador del PRO y el único con el que el ingeniero mantiene una larga relación; los intendentes Julio Garro (La Plata), Pablo Petrecca (Junín), Ezequiel Galli (Olavarría), Javier Martínez (Pergamino), Héctor Gay (Bahía Blanca), Diego Valenzuela (Tres de Febrero) y Javier Iguacel (Capitán Sarmiento) y la única jefa comunal mujer del espacio, Soledad Martínez (Vicente López).

También estuvieron los legisladores Adrián Urreli, Alex Campbell, Christian Gribaudo y Alejandro Rabinovich, las legisladoras Daniela Reich y Florencia Retamoso, y la diputada Silvia Lospenatto. El encuentro se completó con la presencia del exintendente de Quilmes Martiniano Molina, en representación de los dirigentes que no gobiernan sus distritos.

Se especula que, de regreso a sus distritos, los dirigentes del PRO comenzarán a detallar sus estrategias electorales en el caso de que deban enfrentar internas, tanto a nivel provincial como municipal. Eso si en las próximas reuniones previstas con Larreta, Bullrich y Vidal no deciden acordar listas de unidad.

FUENTE: LETRAP.COM