Schiaretti sale a buscar el voto en Santa Fe sobre las ruinas de Perotti

Aunque para el grueso de los analistas no es conveniente proyectar los resultados de las elecciones provinciales, la foto de Santa Fe pone algunos puntos de atención sobre el impacto del escenario confirmado en las PASO del domingo. Con el peronismo de esa provincia al borde del nocaut, Juan Schiaretti se apoya en la base del socialismo y sale a proyectar su propuesta de centro en un clima de polarización extrema que se concentró entre los extremos de Juntos por el Cambio.

Para el schiarettismo, el resultado es una muestra más de lo que desde hace rato definen como “el fin del kirchnerismo”. En la lectura del cordobesismo, la decisión de Omar Perotti de no romper lanzas con el Frente de Todos complicó la gestión, primero, e impactó en el resultado electoral adverso del fin de semana, después.
En esa marco, el espacio alternativo de centro saldrá a disputar la elección nacional concentrándose en el interior productivo, que reconocen como tierra fértil para apuntalar las chances de Hacemos por Nuestro País en la contienda electoral que tiene su punto central en el mes de octubre. Para el socialismo santafesino y para el cordobesismo, la carta para el triunfo estará puesta en “el valor de las buenas gestiones”. Allí, aseguran “ni en Córdoba ni en Santa Fe, nadie puede discutir demasiado”.
El análisis del espacio centrista advierte que la elección que le dio la victoria a Maximiliano Pullaro marca el “hartazgo” del electorado con las dos expresiones que “exponen a los extremos de la grieta”: el kirchnerismo y el discurso de “todo o nada” de Patricia Bullrich. La nunca recomendable lectura lineal al respecto advierte, entonces, que las chances de Schiaretti crecerían en caso de que la ex ministra de Seguridad de la Nación sea la que se imponga en las primarias opositoras.
Allí, al identificar a Sergio Massa con el kirchnerismo, el discurso cordobesista encontraría un surco por el cual cosechar la siembra antigrieta. Algo que se complicaría un poco más si el candidato a presidente termina siendo el porteño Horacio Rodríguez Larreta.
Sobre el escenario de la escuadra triunfante, Larreta volvió a reivindicar la estrategia del armado amplio que en algún momento lo acercó a Schiaretti. “Este es un triunfo de la amplitud, el frente de frentes que es una muestra de cómo sumando es que le vamos a ganar al kirchnerismo y vamos a poder cambiar la Argentina, como lo hicimos en San Juan y en San Luis”, dijo el hombre con el flamante candidato a gobernador a su lado.

A sabiendas de un escenario que concentraría la atención en la disputa entre Pullaro y Losada, hay una lectura proveniente del socialismo va en sintonía con la de los armadores de Schiaretti. Señalan que la polarización del pasado fin de semana no debería ser trasladable a la contienda nacional, sobre todo mirando a octubre, donde JxC ya tendrá un candidato definido.

“La territorialidad del socialismo ha demostrado firmeza a pesar del voto útil que mucha gente expresó volcándose hacia Pullaro para que no gane Carolina Losada”, advierten, a la expectativa de recuperar una buena parte de ese electorado para la elección nacional.

Con todo, el espacio antigrieta de Schiaretti presentará oficialmente su lista de candidatos y candidatas nacionales a mediados de esta semana en la ciudad de Santa Fe y desde entonces se espera una campaña corta pero intensa. El gobernador que quiere ser presidente se sumará la próxima semana, una vez resuelta la elección en la capital cordobesa, otro de los puntos claves para anotar en la estrategia del espacio.

Según señalan desde Rosario, de esa situación dependerá el futuro de una convivencia estratégica que supieron protagonizar Pablo Javkin y Martín Llaryora. Si bien reconocen el respeto del rosarino hacia el gobernador electo en Córdoba, también advierten que la halconización paulatina del intendente de la otrora “Chicago argentina” derivará en una alineación definitiva con JxC a nivel nacional. Una victoria de Rodrigo De Loredo en la capital cordobesa alejaría completamente al rosarino de la eventual alianza estratégica que en algún momento se pudo sostener con el peronismo cordobés.

¿Fuerza derrotada o funcional?
Para el cordobesismo, la vigencia de la fuerza aliada no se discute y sigue intacta. La apuesta más relevante del socialismo santafesino estaba puesta en la lista de candidatos a diputados y diputadas provinciales que encabezó Clara García. Las ventajas del sistema electoral hizo que la rosarina se imponga en la interna logrando encabezar la nómina que competirá en septiembre. Ese triunfo no es un dato menor para la conducción del partido que minimiza la derrota de su presidenta a nivel nacional, Mónica Fein, y que destaca la proyección del “trabajo territorial” del partido que gobernó la provincia entre el 2007 y el 2019.

En ese punto, se preparan para la elección nacional, que en el territorio tendrá como principal protagonista al precandidato a diputado nacional por la lista de Hacemos por Nuestro País, Esteban Paulón. A partir de esa mirada, el socialismo entiende que, al igual que el electorado cordobés, la gente “sabe diferenciar las instancias electorales”.

Si bien destacan que la situación provincial tiene la particularidad de un formato electoral distinto al del resto del país, entienden que Santa Fe es una provincia “independiente” respecto a los factores nacionales. De hecho, miran al escenario del 2019, también hiperpolarizado, donde la boleta que encabezó Roberto Lavagna, que contó con el apoyo de Miguel Lifschitz, superó la media nacional y obtuvo el 8,98% de los votos. Sólo en Salta, gobernada entonces por el candidato a vice de la fórmula de Consenso Federal, Juan Manuel Urtubey, el espacio cosechó un porcentaje más alto.

En esa dirección apuestan a que la defensa de federalismo y la “construcción de una propuesta desde el interior productivo” no sólo apuntalará la performance electoral de la fórmula que integran Schiaretti y Florencio Randazzo sino que también le servirá al espacio para renovar sin problemas la banca de Enrique Estévez. El diputado, cuyo mandato vence en diciembre, ingresó en 2019; en el 2021 asumió Fein; y el socialismo espera alcanzar el piso de ocho o nueve puntos para que Paulón se sume al Congreso este año.

Con información de Letra P, sobre una nota de César Pucheta