Sergio Massa pasó por Rosario y mimó a Lewandowski

A dos semanas de las elecciones provinciales, el candidato presidencial de Unión por la Patria (UP) Sergio Massa pasó por Rosario con un objetivo entre ceja y ceja: mejorar el rendimiento del peronismo en la provincia de Santa Fe, donde tanto provincial como nacionalmente sufrió su peor derrota en décadas. Por eso, el ministro de Economía bajó con un discurso enfocado en la crisis de inseguridad que atraviesa Rosario y pidió apoyo para Marcelo Lewandowski, el candidato a gobernador del justicialismo. Omar Perotti, a medias: aprovechó la ocasión para reclamar más fuerzas federales.

La excusa para la visita de Massa fue la presentación del nuevo sistema de alerta que llevarán los colectivos, producto de una alianza entre el sistema SUBE y el 911 federal. Por eso, la puesta en escena se dio en el playón de la base de operaciones de Rosario Bus, la mayor empresa privada de transporte público del sur santafesino. El frío, el viento y la lluvia intermitente no colaboraron en la espera, que se estiró más de dos horas. Los viejos hábitos son los más difíciles de erradicar: la impuntualidad de Massa ya es el paradigma de esa regla.
La fauna peronista santafesina dio el presente. A los mencionados Perotti y Lewandowski se le sumaron todos los miembros de la tira de diputados nacionales de UxP en Santa Fe: el jefe de bloque en la Cámara Baja Germán Martínez, la directora nacional de Migraciones Florencia Carignano, el ministro de Transporte Diego Giuliano, la referente del Instituto Patria en la provincia Maria de los Ángeles Sacnun y el presidente comunal de Arteaga, Julián Vignatti. Además, también acompañaron todos los candidatos provinciales del peronismo en Rosario.

Hubo un ausente: Juan Monteverde. El candidato a intendente dio el batacazo al vencer a Roberto Sukerman en las PASO y se quedó con la postulación peronista sin pertenecer a ese partido. Massa ni lo mencionó en su discurso. “No importa a quién elijan los rosarinos como intendente, todos saben que prefiero a uno, pero vamos a trabajar juntos con el intendente que elijan”, dijo. Algunas fuentes hablan de una distancia estratégica para permitirle a Monteverde abordar mejor el centro, clave en su ballotage contra Pablo Javkin. Sin embargo, hoy Wado de Pedro retwitteó uno de sus spots.
Sin dudas, lo más políticamente jugoso fue el apoyo irrestricto que el candidato a presidente le brindó a Lewandowski. “Marcelo, te conozco, conozco tu compromiso con Rosario”, lo mimó. “Quiero gobernar el país y lo quiero hacer junto a Lewandowski, vamos a trabajar juntos para que no quede un botón de pánico, una cámara, una parada segura sin poner en Rosario, para que vuelva a ser la Chicago argentina por la producción y dejemos de decir que Rosario sangra”, dijo, mientras el candidato a gobernador aplaudía desde el escenario.

No es casual el apoyo de Massa a Lewandowski. El massismo es uno de los pilares más importantes que tiene el periodista en su candidatura. De hecho, fue Giuliano -referente del Frente Renovador santafesino- el que terció por pedido del propio candidato a presidente entre Perotti y Lewandowski sobre la hora del cierre de listas para que haya acuerdo y sea el candidato a gobernador. Con poca trayectoria en la política, a la que ingresó de la mano del bielsismo, el senador se apoya en la estructura massista para encarar la campaña y no depender enteramente del gobierno provincial.

La seguridad fue el tema dominante de la visita fugaz del candidato. “Yo, como argentino, si pretendo dirigir los destinos de nuestra patria me tengo que comprometer en persona con los rosarinos”, avisó, tras firmar un convenio de fortalecimiento para la delegación local de la Unidad de Información Financiera. “Pensamos en el narcotráfico como jóvenes soldaditos, pero nos olvidamos que hay señores de saco y corbata, que usan gemelitos, pero que manejan y esconden la plata de los narcotraficantes”, bramó el tigrense.

En línea con la prédica sobre seguridad, el ministro de Economía se animó a meterse en un tema de alta tensión que ya generó cruces entre el gobierno nacional y el gobierno provincial: la presencia de fuerzas federales en Rosario. Massa fue a fondo y le pidió al comandante en jefe de Gendarmería, quien lo acompañaba en el escenario, “que se comprometa a saturar Rosario con gendarmes para que los rosarinos recuperen la calma”. “Ese es el compromiso que tiene que tener el estado federal, y depende del brazo ejecutor de Gendarmería con apoyo de Prefectura y la Policía Federal”, agregó.

Ese mensaje fue una respuesta al discurso de Perotti, que había antecedido a Massa y estructuró su alocución en un solo pedido: más fuerzas federales. “ministro, tuvimos conversaciones, sabe lo que le he planteado: la necesidad de la presencia de las fuerzas federales, necesitamos sumarle más particularmente en Rosario”, le había dicho el gobernador en un áspero discurso. “Hemos tenido más presencia y la gente lo recuerda”, comparó.

Incluso, Perotti hasta reeditó su vieja pelea con el ministro de Seguridad Anibal Fernández. Sin nombrarlo, le pidió a Massa que “en esta etapa pueda convencer a algunos integrantes del gabinete a fortalecer la presencia de las fuerzas federales”. Fernández, por las dudas, ni se acercó y mandó a su segunda, Mercedes La Gioiosa. Sobre lo que se anunciaba, el gobernador sostuvo que “las herramientas para la seguridad, así sean mínimas o simples, suman”. Insaciable.

Con informacion de Letra P.