Karina Milei pasa la motosierra

“Quiero convocar tanto a gobernadores como expresidentes y líderes de los principales partidos políticos a que depongamos nuestros intereses personales y nos encontremos el próximo 25 de mayo, en la provincia de Córdoba, para la firma de un nuevo contrato social llamado Pacto de Mayo ”. Esa fue la invitación extendida por el presidente Javier Milei en su discurso inaugural en el Congreso el 1 de marzo.

El mandatario tendió la mano para el convite a “la casta” después de haber dedicado los 57 minutos anteriores a arremeter contra la política, mientras masticaba el enojo por el reciente naufragio de la versión original del proyecto ley ómnibus.
 
A 12 días de la fecha fijada, aún no fueron cursadas las invitaciones para un evento que según el oficialismo se realizará con o sin ley ómnibus XS sancionada. Las mismas se enviarán desde la Secretaría General de la Presidencia, a cargo de Karina Milei. La dependencia está en tratativas de adquirir las medallas de la Orden del Libertador San Martín que la Casa Rosada quiere repartir entre los gobernadores asistentes.

Se habilitará por decreto presidencial, que debe sortear al original (publicado en 1957) que establece que es un reconocimiento que sólo se entrega a “funcionarios civiles o militares extranjeros que en el ejercicio de sus funciones merezcan en alto grado el honor y reconocimiento de la Nación”.

Karina Milei y una lista con tachaduras
La invitación nació engañosa. En el despacho de El Jefe admiten que no serían convocados los 24 gobernadores, incluyendo al alcalde porteño Jorge Macri). Hay cuatro vetados de entrada: Axel Kicillof (Buenos Aires), Ricardo Quintela (La Rioja), Sergio Ziliotto (La Pampa) y Gustavo Melella (Tierra del Fuego). Es porque hablaron -o gesticularon, según Milei- contra el Pacto de Mayo.
A los mandatarios enrolados en JxC que hasta ahora se movieron como aliados, se suman los filooficialistas Osvaldo Jaldo (Tucumán) y Raúl Jalil (Catamarca) y el anfitrión, Martín Llaryora. Las invitaciones del resto se confeccionarán, dicen en Balcarce 50, dependiendo de cómo voten los senadores de sus provincias la ley ómnibus XS y el paquete fiscal.

¿Podrían invitar a todos a la espera de que rechacen? Es una opción, por ahora no expresada en la Casa Rosada donde prefieren directamente controlar la lista de invitados.

Con esto surge un posible inconveniente de tiempos. Si hay dictamen esta semana, instancia que fue pospuesta el jueves por falta de apoyo, la sesión en la cámara alta podría realizarse el 23, al filo del 25 con el corazón en la boca. La idea de promocionar una épica con lógica mundialista gana terreno en un sector del oficialismo. Para entonces, las medallas deberían estar compradas. Sin embargo, como contó Letra P, el peronismo calcula que puede patear el dictamen para el mismo 23.

En el rubro “expresidentes” no hay demasiado. Alberto Fernández salió del ostracismo para criticar en redes al gobierno libertario y cerca de Cristina Fernández de Kirchner apelan a la ironía: “Ni Karina sabe qué es el Pacto de Mayo”. Sin embargo, no adelantan una respuesta ante una eventual invitación.

“Presidente, el PRO estará en Córdoba para firmar el Pacto del 25 de Mayo”, fue la promesa de Mauricio Macri apenas terminó el discurso del 1M de Milei. Hace pocos días revalidó ante los suyos su asistencia. Lo hará en calidad doble: como expresidente y como titular de un partido político, otro rubro para las invitaciones.

Tampoco irá todo el PRO, ya que es poco probable que Milei acepte compartir un mismo escenario con Horacio Rodríguez Larreta.

Cerca de Martín Lousteau, titular de la Unión Cívica Radical (UCR), tampoco quieren adelantar una respuesta. Crítico de varias medidas del gobierno, la presencia del economista podría estar signada más por su voto en el Senado ante la ley ómnibus XS.

El titular de la bancada radical en la Cámara de Diputados, el cordobés Rodrigo De Loredo, dijo en las últimas horas que la UCR no participará del encuentro en Córdoba “si no se incorpora a la educación” entre los puntos del pacto.

El caso del PJ es particular: con la licencia de Alberto Fernández, nadie ocupó esa presidencia, así que el Gobierno tendría una excusa válida para no enviar ninguna invitación al principal partido opositor. El término “líderes” que usó Milei el 1M, sin embargo, convertiría la justificación en una mera formalidad.

Es un término que podría caberle a Elisa Carrió, principal referente de la Coalición Cívica, a quien difícilmente el Gobierno convoque para ir a Córdoba. Como fuere, a juzgar por sus críticas al Presidente, es dable pensar que no iría aunque fuera invitada. Llamó a Milei el “caballo de Troya de las peores mafias y de la matriz del saqueo final a la Argentina”.

A Milei y los gobernadores se sumará el gabinete. En la Casa Rosada dan por sentado que los principales funcionarios viajarán a Córdoba. La duda es hasta qué escalafón se cursarán las invitaciones. Por las dudas, como no quiere quedarse afuera, el secretario de Turismo, Deporte y Ambiente, Daniel Scioli, fue invitado por el club Talleres para visitar la provincia unos días antes de la fecha patria y aprovechará para quedarse al Pacto de Mayo.

CON INFORMACION DE LETRA P.