El Gobierno cree que la reforma electoral obligará al PRO a apurar una definición sobre una fusión con La Libertad Avanza
POLÍTICA Federico GalliganiEl jueves pasado por la mañana, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, recibió en sus oficinas de la Casa Rosada a los diputados de la oposición “dialoguista”, con quienes conversó sobre las últimas reformas aprobadas por el Congreso y los proyectos que tiene en mente presentar próximamente.
Unas horas más tarde, ese mismo día, el vicejefe de Gabinete Ejecutivo, José Rolandi, y el secretario del Interior, Lisandro Catalán, salieron de Balcarce 50 con rumbo al recinto legislativo, para continuar dialogando con los referentes de los distintos bloques parlamentarios.
De acuerdo con lo que precisaron a Infobae fuentes oficiales, mientras que en el primer encuentro se trataron “temas generales, que incluyeron también la Ley Bases y el avance del RIGI”, el segundo tuvo el objetivo único de acordar los cambios en el sistema político.
Tal como anticipó este medio, el Gobierno busca impulsar modificaciones en el financiamiento de los partidos, limitaciones para las campañas, la eliminación de las PASO y la incorporación de la boleta única.
Las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias fueron creadas en el 2009, cuando se sancionó la ley 26.571, mediante la cual se estableció que los partidos políticos están forzados a elegir a sus candidatos a través de internas.
Este mecanismo sirvió en la mayoría de los casos como grandes y costosas encuestas previas a los comicios generales, ya que gran parte de los espacios que participaron de votaciones desde entonces lo hicieron con listas únicas para los cargos más importantes.
Sin embargo, hay una agrupación que sí supo hacer uso de esta herramienta: el PRO. Tanto en las presidenciales que terminó ganando Mauricio Macri, como en muchas otras ocasiones, este partido definió a sus candidatos en primarias que mantuvo con sus eventuales aliados, como la Unión Cívica Radical (UCR) y la Coalición Cívica-ARI, en Cambiemos y Juntos por el Cambio.
A partir del triunfo de La Libertad Avanza y la asunción de Javier Milei en la Casa Rosada, la política se fue reordenando y, de cara a las legislativas del 2025, el espacio liderado por Macri se enfrenta a la decisión de fusionarse con el oficialismo, como reclama la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, o aliarse, pero manteniendo una identidad propia, como sostiene la diputada María Eugenia Vidal, entre otros.
En este contexto, si finalmente no hay unificación de partidos, pero sí un acuerdo estratégico para competir en un mismo frente, las Primarias podrían servir para evitar largas y duras negociaciones entre ambos sectores por los lugares en las boletas.
Sin embargo, si finalmente las PASO se eliminan, como pretende el Gobierno, el PRO sería empujado o bien a aceptar la fusión o a acordar una alianza con el oficialismo y conversar las ubicaciones en las boletas de manera privada. Esto en caso de no querer competir por afuera y arriesgarse así a una derrota.
Es por este motivo que en el partido amarillo existen reparos a la iniciativa de reforma política que promueve el Poder Ejecutivo, principalmente en lo que respecta a las primarias, y presiona para avanzar con alguna de las alternativas que están en agenda.
Hace tan solo unos días, el jefe del bloque de diputados del PRO, Cristian Ritondo, le entregó una carta a Francos y al presidente de la Cámara, Martín Menem, en la que enumeró los proyectos que la bancada presentó recientemente y que, en muchos casos, “coinciden con iniciativas que el Gobierno Nacional anunció en el último tiempo”.
En este sentido, Ritondo busca imponer un texto que elaboró su compañera María Eugenia Vidal y que plantea mantener las elecciones Primarias, Abiertas y Simultáneas (PAS), pero transformarlas en optativas.
“De este modo, en caso de que las agrupaciones políticas presentaren listas únicas en cualquiera de las categorías, dichas categorías no deben participar de las elecciones primarias y sus precandidatos quedan proclamados como candidatos en las elecciones generales, comunicando tal circunstancia a la Justicia Electoral”, señala la iniciativa.
Entre los argumentos que expuso, Vidal reconoció que, desde su creación, “fueron muy pocos los casos (UNEN 2013, Cambiemos 2015 y Juntos 2023) en los cuales los partidos decidieron elegir en elecciones internas competitivas a sus candidatos para las generales”.
Por su parte, si bien en el oficialismo se muestran abiertos a negociar algunos aspectos de la reforma política, por el momento prevalecía la idea de insistir con la eliminación total de las primarias que, para Francos, “no sirven para nada”.
“¿Cuál es el negocio de la política? Aliarse con otras fuerzas para poder mantener vigente la personería y cobrar fondos por las boletas electorales, hay que darle un padrón, etc. Todas estas cosas que pasan solamente en la política argentina, no en otro lugar. Entonces, muchas veces los partidos que reciben esos fondos no emiten las boletas porque ¿quién se las va a usar? Y se guardan los fondos. Esta es la realidad”, sostuvo el jefe de Gabinete ante un grupo de importantes empresarios, al participar semanas atrás de un evento del Consejo Interamericano de Comercio y Producción (CICYP).
Más allá de esto, Rolandi y Catalán también conversaron con los jefes de los bloques dialoguistas sobre el resto de los aspectos del proyecto: el financiamiento de los partidos, limitaciones para las campañas, y la incorporación de la boleta única.
Esta es la discusión que el Gobierno quiere instalar en la agenda pública y es uno de los puntos que quedaron por fuera de los temas que se van a trabajar en el Consejo de Mayo, que todavía tiene que elegir a sus representantes.
* Para www.infobae.com