¿A sangre fría o legítima defensa?: final abierto en el juicio a la joven que mató a su novio en Santo Tomé

El destino de Lourdes Seniquel, la joven acusada por el homicidio de su pareja en Santo Tomé, se define entre varias alternativas que van desde la prisión perpetua a la absolución de culpa y cargo. El veredicto será dado a conocer el lunes al mediodía.
 
Este viernes, las partes realizaron los alegatos de clausura en el juicio por la muerte de Ayrton Díaz, cometida en septiembre de 2021. La pena de prisión perpetua por el delito de homicidio calificado por el vínculo fue reclamada por la fiscal del caso, Ana Laura Gioria, y por el abogado querellante, Daniel Rocca.

 En tanto, el defensor público Nicolás Mosconi solicitó la absolución de culpa y cargo de Seniquel por legítima defensa, o una condena más baja de la pena mínima de homicidio simple, por considerar acreditado el contexto de violencia de género y la vulnerabilidad multicausal de Seniquel.

La clave del juicio
Para definir el destino de Lourdes Seniquel, las juezas Celeste Minniti y Rosana Carrara, y el juez Octavio Silva, deberán decidir si la relación entre Lourdes y Ayrton estaba signada por la violencia de género, como sostiene la defensa, o si era una relación con violencia mutua, sin existir predominio del hombre sobre la mujer, como entienden los acusadores.

 En el juicio quedó acreditado que tanto Lourdes como Ayrton se controlaban, se celaban, se insultaban y se agredían físicamente. Para la acusación, las agresiones de Lourdes eran una acción voluntaria de la joven, mientras que para la defensa, eran acciones reactivas a la violencia de Ayrton.

 Cada una de las partes repasó las declaraciones de los testigos que pasaron por los estrados en tribunales: la Fiscalía y la querella destacaron los relatos de los hechos violentos de Lourdes hacia Ayrton delante de terceros, y cuestionaron que los testigos de la defensa sólo aludieron a relatos que Lourdes había referido.

 La fiscal remarcó que la declaración brindada por Lourdes al inicio del juicio no se corroboraba con la prueba producida en el debate: un testigo refirió que ella le había mandado un mensaje a Ayrton para verse esa noche, horas después saber que la relación ya había terminado: el día anterior había pasado por la casa donde habían convivido con Díaz, y había visto a la hermana y a la mamá de Ayrton en el lugar; mientras habían estado juntos, ellas no iban a la casa.

El crimen de Ayrton ocurrió en el interior de la vivienda en Santo Tomé
Para la acusación, Lourdes fue a la casa de Ayrton con la intención de matarlo: un testigo sostuvo que ella una vez le dijo a Díaz, adelante de él, "si me dejás te mato". Además, cuestionó que el celular de Ayrton desapareció de lugar, por lo que no se puede corroborar si Lourdes le envió un mensaje a Ayrton, como sostuvo el testigo, o si él la llamó, como sostuvo Seniquel, "la única no obligada a decir la verdad", remarcó la fiscal.

 Luego, el querellante Rocca adhirió a los alegatos de la Fiscalía y agregó que Ayrton acogió a Lourdes bajo su cuidado a los 16 años, siendo el también muy joven, y que tenía expectativas de formar una familia con ella, de un futuro en común: "un futuro que hoy ya no está... hoy no hay futuro para Ayrton, sólo el dolor de los padres, de los sueños que no serán, de los nietos que no vendrán".

 En tanto, el defensor insistió con el contexto de vulnerabilidad de Lourdes, al que refirió como multicausal, por no contar con contención familiar, y por haber padecido situaciones de violencia en el propio núcleo familiar.

 Mosconi sostuvo también que Seniquel había sido víctima no solo de violencia de género por parte de Ayrton Díaz, sino que también había padecido violencia institucional por varios agentes estatales: por parte de la policía cuando intentó radicar una denuncia por hostigamiento contra Díaz; por las autoridades escolares que conocían su situación familiar y de convivencia con Ayrton cuando era menor de edad, con episodios violentos, y no denunciaron; también desde el área de Niñez de la municipalidad de Sauce Viejo, que tuvieron intervención pero no realizaron ningún seguimiento, y del MPA, que no controló el cumplimiento de la medida de distancia impuesta a Ayrton en 2019 tras la primera denuncia de Lourdes.

 En relación a la actitud de Seniquel luego de la muerte de Ayrton, el defensor sostuvo que ese comportamiento de no pedir ayuda debe estar contextualizado: cada vez que había pedido ayuda, no la tuvo, sostuvo: "Hizo lo único que su familiar referente le sugirió -quedate acá que te vengan a buscar. Y Lourdes se quedó en la casa con su mamá".

Por último, la psicóloga Lucrecia Gancedo, quien actuó como asesora técnica durante el juicio, se refirió al silencio que mantuvo Lourdes durante todo el proceso, y por qué recién dio su versión de lo ocurrido al inicio del juicio: "A menudo las víctimas de violencia de género se sienten atrapadas en un ciclo de vergüenza y miedo, lo que les impide hablar. Cada persona tiene su proceso, y el silencio no siempre implica ocultamiento. Lourdes comenzó a contar su historia cuando encontró un espacio de escucha seguro, a cuatro días del inicio del juicio. Atravesar estos procesos es doloroso porque resulta vergonzoso revivir los episodios padecidos: aquí pasó gente que habló de su intimidad, de su cuerpo. Se la ha revictimizado. Lourdes ha tenido marcas visibles en su cuerpo, y marcas invisibles en su psiquis", explicó.

"No sé cómo explicar el dolor que siento"
Una vez finalizados los alegatos de clausura, la mamá de Ayrton Díaz hizo uso de la palabra en la denominada "declaración de impacto". La mujer se dirigió al tribunal, conmocionada, y expresó: "Todas las mañanas me levanto pensando en mi hijo, hablamos de mi hijo. A las 9 me voy al cementerio, me quedo una hora con él. Mi hijo no era un chico malo como dicen... es un dolor que no le deseo a nadie; mi vida ya no tiene sentido, vivo porque vivo, pero no sé que hacer sin mi hijo. Me duele tanto el alma... él era todo para mí... lo he cuidado tanto para que nadie le haga daño y le quitaron la vida así. No sé cómo explicar el dolor... ¿por qué me lo quitó? ¿por qué me lo tuvo que matar? Yo sé que nadie me va a devolver a mi nene, discúlpenme", terminó, ahogada por las lágrimas.

El caso
El crimen de Ayrton Díaz ocurrió la madrugada del 25 de septiembre de 2021 en la ciudad de Santo Tomé y la causa quedó a cargo de la fiscal Ana Laura Gioria desde el primer momento. En noviembre de 2021 Lourdes Seniquel fue imputada como autora de “homicidio calificado por el vínculo”, tras comprobar que el joven y la víctima mantuvieron una relación de pareja que duró aproximadamente cuatro años y que durante las semanas previas al asesinato había tenido su final.

 En aquellos primeros momentos de la investigación se esclareció cómo ocurrió el asesinato del joven de 22 años, y también el contexto en el que la víctima vivió los últimos días antes de ser asesinado: permanentemente acosado y amenazado por su exnovia, quien -según reveló la investigación- le advirtió en distintas oportunidades que “lo mataría si la dejaba”.

 De las pruebas recolectadas por la fiscal, la que mayor peso tuvo fue una prueba de ADN que conectó a la imputada con el hecho. Se trata del cotejo de una muestra de sangre que fue encontrada en una bicicleta que estaba en la casa de Seniquel, la cual fue allanada cuatro días después del homicidio de Díaz. En esa bicicleta, los miembros de la AIC detectaron que el pedal izquierdo tenías rastros compatibles con sangre, por lo que tomaron muestras y luego las cotejaron con la sangre de la víctima. El resultado confirmó en un 100% que esos rastros eran de la víctima.

 Seniquel había sido arrestada horas después del crimen, y había intentado desvinculase. En la primera jornada del juicio declaró y admitió haber sido la autora de la lesión mortal de Díaz, si bien refirió una situación de defensa, y también de haber prendido fuego un colchón antes de irse, pero no supo explicar por qué lo había hecho.
 
 

Fuente: Aires Digital