La semana económica que se viene

Se suele decir que en marzo comienza formalmente el año. Se terminaron las vacaciones, los chicos vuelven a clases, se inició la actividad en el Congreso, y los precios se vuelven a acelerar. El que no tuvo descanso desde que asumió fue el presidente Javier Milei, y nuevamente, sus anuncios y jugadas político-económicas marcan el ritmo del mercado financiero.

En números
Este mes arrancó con 10 aumentos y hay algunas otras subas rondando que se irán definiendo con el pasar de los días.

Marzo suele ser estacionalmente un mes con inflación alta, empujado, principalmente, por el impacto de la vuelta a las escuelas y el cambio de temporada de ropa. A lo que se suman cuestiones macroeconómicas propias del país como la quita de subsidios en los servicios de luz, posiblemente de gas –a definirse en las próximas semanas-, el aumento del transporte público, la actualización de los impuestos al combustible que impactan en surtidor y en toda la cadena de producción.

Argentina atraviesa un período de estanflación. Es decir, la inflación permanece en niveles elevados, mientras la actividad económica se retrae. La batería de aumentos de este mes ya se empieza a sentir en los bolsillos, y en las distintas facturas que empiezan a llegar.

Por otra parte, el Gobierno oficializó los nuevos haberes mínimos y máximos que percibirán los jubilados desde marzo. La jubilación mínima pasó de $105.713 a $134.445, mientras que la prestación máxima, trepó de $711.346 a $904.689,54.

Las reservas del BCRA continúan engordándose lentamente. Las divisas del agro aportaron 1.499 millones de dólares a las arcas del Gobierno en el mes de febrero.

Además, se espera que, al igual que en enero, el gobierno de Milei logre el superávit fiscal de las cuentas públicas, tanto a nivel financiero como primario, y pese a la retracción del nivel de actividad económica. Aunque cabe destacar, que lo lograría a costa de los jubilados y recortes de subsidios a las tarifas de servicio público.

La economía argentina, ¿y ahora qué?
En medio de la lucha feroz que Milei mantiene con los gobernadores, el Presidente redobla la apuesta y en una entrevista con el Financial Times aseguró que no necesita del Congreso para avanzar en sus reformas económicas.

Al ser consultado por el fracaso de la ley ómnibus, el libertario aclaró que no vio "destrozado" el proyecto, sino que lo retiró y que "planea esperar hasta después de las elecciones legislativas de mitad de período a finales del año próximo" para intentarlo "de nuevo y con un paquete completo". Y agregó que, "no esperaría tanto tiempo para seguir adelante con gran parte de su agenda de reforma, y está listo para hacerlo sin el Congreso".

En esta línea, durante la apertura de la Asamblea Legislativa, convocó a todas las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a firmar un innovador acuerdo fundacional: el "Pacto del 25 de Mayo". Lo presentó como "una respuesta a los desafíos contemporáneos que enfrenta Argentina, proponiendo medidas audaces en áreas clave como la economía, la política, y el marco social".

Entre las propuestas que Milei busca incluir en el Pacto figuran la inembargabilidad de la propiedad, equilibrio fiscal innegociable, limitar el gasto público a 25% del PBI; una reforma tributaria para reducir la presión impositiva, otra laboral para favorecer el trabajo formal; discutir la coparticipación; reforma previsional para posibilitar la jubilación privada; una reforma política; un compromiso con las provincias para avanzar en la explotación de los recursos naturales y la apertura al comercio internacional.

Su "plan motosierra" marcha a paso firme, y desde el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) no solo elogiaron su plan de Gobierno, sino que asistirán al mandatario argentino para suavizar el impacto social de su ajuste fiscal.

"El BID siempre ayuda a los países y los Gobiernos. A veces los Gobiernos cambian de un extremo a otro extremo y ahora tenemos un cambio que hace algo que muchos pidieron, que es el ajuste fiscal. Lo común era que ‘lo fiscal no tiene efecto’ y que el financiamiento (monetario) era inflacionario. Conocemos bien (lo que pasó) en los 80 y 90. Están cambiando de manera grande en la Argentina", expresó el presidente de la entidad.

Y añadió: "La contribución del BID es que ese cambio sea de la forma más eficiente posible: con un cambio social muy pesado y, por lo tanto, insostenible, o de una forma mejor".

Fuerte apoyo de EE.UU. a Argentina
En lo que respecta a la economía, el ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, echó por tierra toda versión de que el Gobierno esté negociando un nuevo programa con el FMI, diferente al que actualmente rige y fue pactado por Martín Guzmán, el primer ministro de Economía de la era Alberto Massa.

Por otra parte, el titular del Palacio de Hacienda participó de la Cumbre del G20 que se realizó en Brasil y tuvo dos reuniones claves. Primero, se reunió con la directora gerente del FMI, Cristalina Georgieva. Caputo aseguró que la líder del Fondo "celebra y apoya" las medidas de ajuste fiscal y reformas que impulsa el gobierno de Javier Milei.

En esta línea, Georgieva, dijo a través de su cuenta de X (exTwitter) que mantuvo un “excelente encuentro” con Caputo. “Saludé los esfuerzos sostenidos de las autoridades para restaurar la estabilidad, apoyar a los más vulnerables y generar apoyo para las reformas”, dijo Georgieva.

Luego, el titular de Economía se reunió son la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen. Tras el encuentro, la funcionaria estadounidense manifestó a través de un comunicado que “la administración Milei ha heredado una difícil tarea de estabilización, pero ya ha dado algunos pasos importantes para restaurar la sostenibilidad fiscal, ajustar el tipo de cambio y combatir la inflación”.

E hizo hincapié en que existen “muchas áreas de colaboración entre Estados Unidos y Argentina en los temas que se están discutiendo en la agenda de Finanzas del G20 de este año”.

¿Se termina el veranito financiero del dólar blue?
La semana pasada, el dólar blue operó a la baja, pero en la tarde del viernes pegó un salto de $15 y cerró a $1050. Por otra parte, se cortó la racha compradora y el Banco Central debió vender 142 millones de dólares en el mercado mayorista. Igualmente, febrero finalizó con récord de compras y un saldo a favor acumulado de 2.357 millones de dólares.

La gran pregunta es, ¿cómo reaccionará el mercado? ¿Se terminó el "veranito" financiero? La respuesta y el apoyo -o no apoyo- del sector empresario será clave. Resta ver cómo avanza la semana, las divisas, las acciones y el mercado en general.

CON INFORMACION DE EL LITORAL.