En su discurso en Nueva York, Milei dio las nuevas condiciones para salir del cepo. En esta oportunidad estableció dos condiciones, por un lado, dijo Milei que el cepo se va a levantar cuando la inflación sea igual a cero y, además, la base monetaria sea igual a la base monetaria amplia.
Según Milei la tasa de inflación observada del IPC es del 4% mensual. De ese 4%, sostiene Milei, 2 puntos corresponden al crawling peg del 2% mensual, medio punto a la inflación internacional y 1,5 puntos es inflación propia.
Y aquí la pregunta es: ¿cómo define Milei inflación cero? En realidad, no va a ser cero, sino que dijo textualmente que cuando desaparezca ese 1,5% del 4% de inflación, se va a levantar el cepo. Pero inmediatamente agregó que va a coincidir con que la base monetaria sea igual a la base monetaria amplia.
Nueva confusión. En realidad, la base monetaria amplia ya no existe porque la base monetaria amplia es la base monetaria más los pasivos remunerados. Pero como los pasivos remunerados, que era la deuda del BCRA con los bancos, fue transferida al Tesoro, hablar de base monetaria amplia es confundir todo porque es hablar de algo que ya no existe.
Lo que está diciendo Milei es que toma como referencia el momento en que se decide pasar los pasivos remunerados al tesoro. En ese momento la base monetaria amplia era de $ 47 billones equivalente a 9,1% del PBI.
Como los pasivos remunerados no desaparecieron por arte de magia, Milei sabe que por más que ahora estén en cabeza del tesoro, igual son un riesgo. Por lo tanto, cuando la base monetaria llegue a $ 47 billones, va a significar que se cancelaron las LEFIS y las LECAPs.
¿Cómo cancela las LEFIS y las LECAPS? Aquí surge un interrogante porque el tesoro debería generar un superávit fiscal primario que le permitiera pagar los intereses que devengan esos pasivos, más lo suficiente para cancelar las LEFIS y LECAPs, algo que luce imposible.
De ahí que surge en los informes del BCRA que a medida que aumente la demanda de moneda por mayor confianza en los agentes económicos, se emitirá para cancelar las LEFIS Y LECAPS.
¿Cuándo ocurriría que desaparecen las LEFIS y LECAPS y la Base Monetaria iguale a la Base Monetaria Amplia en palabras de Milei? A fines de 2026 de acuerdo al gráfico que presenta el Informe del BCRA. De manera que, por ahora, todo parece indicar que el cepo continuará hasta, por lo menos, fines de 2026.
De todas formas, hay una contradicción con el discurso de Caputo cuando dice que no va a emitir más moneda y el peso va a ser la moneda fuerte, porque el informa del BCRA muestra que la Base Monetaria (emisión de moneda) va a crecer hasta diciembre del 2026 y Caputo dijo que la gente va a tener que vender sus dólares para pagar los impuestos.
¿Cuál es la contradicción de Caputo? Que de acuerdo al informe de BCRA la base monetaria crece hasta llegar a los $ 47,7 billones.
Aquí surgen dos problemas. En primer lugar, si no van a emitir pesos y van a ser escasos, ¿por qué la base monetaria va a crecer hasta llegar a los $ 47,7 billones? O emite o no emiten.
Segundo punto, es preocupante la afirmación de Caputo porque los impuestos, que son un flujo que tienen que afrontar los contribuyentes, deberían salir del flujo de ingresos del contribuyente y no de los ahorros que tenga el contribuyente.
Si el contribuyente tiene que desahorrar para pagar los impuestos, entonces estamos en el peor de los mundos, porque el sector privado es el que va a asumir todo el peso del ajuste y va a tener que usar sus ahorros para financiar al Estado en vez de usar sus ahorros para invertir, crear nuevos puestos de trabajo y mejorar la productividad de la economía.
En su discurso, Milei terminó esa parte del cepo diciendo que cuando ya no queden LEFIS y LEBACs se podrá levantar tranquilamente el cepo porque no habrá más balas para cargar las armas que puedan tirar la estabilidad macroeconómica abajo.
Una afirmación muy contradictoria para alguien que repite todo el tiempo que es liberal libertario termina viendo al mercado como un enemigo que lo quiere voltear. Mientras siga el cepo se hace muy difícil que lluevan inversiones y se solucione el problema de la desocupación.
Comparando junio de este año, contra noviembre pasado, el sector privado perdió 136.370 puestos de trabajo en relación de dependencia en el sector formal de la economía, en tanto que el sector público perdió 37.561 puestos de trabajo en el Estado, incluyendo nación, provincias y municipios.
En porcentajes, el sector privado perdió el 2,14% de los puestos de trabajo que tenía en noviembre y el sector público perdió el 1,1% de los puestos de trabajo de noviembre.
El mayor peso del ajuste en puestos de trabajo recae sobre el sector privado. El problema fundamental del gobierno es que tiene miedo de levantar el cepo, tener un corrida financiera y cambiaria y que la inflación se le vuelva a desbordar.
La realidad es que no hay banco central en el mundo que pueda dominar una corrida financiera y cambiaria cuando el mercado pierde la confianza.
Pero más allá de esa realidad, la otra realidad es que no se ve cómo va a hacer el BCRA para acumular reservas propias. ¿Quién lo va a capitalizar? Se habla de un préstamo del FMI o que si gana Trump le consiga US$ 15.000 millones.
Dudo que alguien le preste a la Argentina US$ 15.000 millones para que los rife en el mercado para contener la suba del dólar en caso de una corrida cambiaria.
Luis Caputo ya tuvo su experiencia en 2018 cuando era presidente del BCRA y tiene pánico de que le ocurra lo mismo cuando perdió US$ 13.700 millones de reservas entre el 14 de junio y el 25 de septiembre de 2018 cuando fue presidente del BCRA. Llegó a tener US$ 63.274 millones y se fue con US$ 49.568 millones por querer enfrentar al mercado.
Lo que percibe el mercado es que Argentina no tiene con qué pagar los vencimientos de deuda del año que viene, pero con este riesgo país tampoco tiene acceso al mercado voluntario para hacer el rollover de la deuda.
En un país que corre un eventual riesgo de default, nadie va a invertir y el riesgo es que, si el mercado se pone nervioso, se produzca una corrida financiera antes de terminar con las LEFIS y LECAPS y tengamos un salto cambiario e inflacionario justo antes de las elecciones.
Milei tiene su apoyo en la gente, aunque diferentes encuestas y el Índice de Confianza en el Gobierno que publica mensualmente la Universidad Torcuato Di Tella empiezan a mostrar caídas en el apoyo.
La gente no aguanta un ajuste interminable y una recesión eterna. La salida es terminar con el cepo que impide el ingreso de capitales para invertir en el sector real de la economía. De tantos firuletes financieros que hicieron, quedaron entrampados en el cepo y no saben como salir.
Guste o no, el ajuste se hizo y se sigue haciendo sobre el sector privado. Los 11 puntos de más pobres que se publicaron la semana pasada muestran que esos 11 puntos más de pobreza no son todos de la casta, ni que el 66% de lo niños que viven debajo de la línea de pobreza son casta.
El ajuste, una vez más, recae plenamente sobre el sector privado mientras los senadores se aumentan sus salarios. El gobierno no solo está desesperado por conseguir dólares y no caer en default, también está complicado porque la economía no se recupera tan velozmente como pronosticó Milei.
Tal vez Milei debería dejar de considerarse el segundo político más importante del mundo, largar un poco Twitter, repensar su gabinete y tener un plan económico que genere un shock de confianza.
Es hora de que entienda que terminó la campaña electoral y es hora de gobernar.
CON INFORMACION DE MDZOL.COM