La sucesión de Axel Kicillof

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En sus entornos dicen que falta una eternidad y que no es momento, pero dos dirigentes con expectativa de suceder al gobernador Axel Kicillof en 2027 comenzaron a caminar la provincia de Buenos Aires. Uno es el ministro de Infraestructura bonaerense, Gabriel Katopodis; el otro es el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi. Dos hombres fuertes del conurbano muy cercanos al mandatario.

Ambos son parte de la mesa chica del gobernador, compartieron gabinete durante el gobierno de Alberto Fernández y vienen del intendentismo del conurbano, pero tienen estilos bien diferentes: si se los catalogara bajo la lógica que dividió al PRO durante años, Ferraresi sería un halcón y Katopodis una paloma.
 
Como sea, cada uno por su lado comenzaron a recorrer el territorio bonaerense con plenarios y reuniones políticas. En ambos campamentos dicen que el objetivo es el reordenamiento del peronismo, detonado con la llegada de Javier Milei a la Casa Rosada, y darle músculo político al armado del gobernador, a quien impulsan como próximo candidato presidencial.

Jorge Ferraresi y el cuchillo entre los dientes
El intendente de Avellaneda es uno de los dirigentes bonaerenses que se mostró más activo desde la llegada de Milei a Balcarce 50. Encabeza reuniones a las que convoca sobre todo a la dirigencia que no comulga con Máximo Kirchner. Está decidido a enfrentar a La Cámpora en todos los ámbitos que sean necesarios y ya trabaja abiertamente por la candidatura presidencial de Kicillof.
Además de las reuniones chicas y cerradas que encabeza a diario, Ferraresi comenzó una serie de actividades en Avellaneda y fuera de su distrito. En el pago chico inició un ciclo de charlas bajo la consigna ¿Qué nos faltó? Participan ex ministros de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner. Los primeros invitados de la vieja guardia kirchnerista fueron Julio De Vido, Amado Boudou y Jorge Taiana. Esta semana será el turno de Carlos Tomada.

Fuera de su territorio ya encabezó un plenario en Lanús, gobernado por el camporista Julián Álvarez. Ahí planteó su plan para la candidatura de Kicillof y la posibilidad de jugar una interna contra La Cámpora. Además, inició un ciclo de plenarios bajo la consigna “Repensando el peronismo bonaerense”.

La primera parada fue Chivilcoy, la segunda fue el viernes pasado en Mar del Plata, donde estuvo acompañado de Manino Indart, un dirigente históricamente enfrentado a la referente camporista en ese distrito, Fernanda Raverta. En ese encuentro estuvo presente un grupo de ex funcionarios sciolistas, entre ellos Alberto Pérez, Oscar Cuartango, Baldomero Álvarez y Nora de Lucía.

“Todos los actores y sectores del campo popular tenemos que comprometernos a acompañar y apoyar al gobernador Kicillof”, dijo Ferraresi a la prensa y reiteró que “los líderes son los que ganan elecciones”. Además, pidió una autocrítica porque “de seis elecciones se perdieron cinco”.

Gabriel Katopodis, bajo el mantra de la unidad
Katopodis es un ferviente militante de la unidad y los consensos. Comenzó a recorrer la provincia con los encuentros que denominó “¿Peronismo para qué?”. A esos encuentros llega acompañado del escritor y guionista Pedro Saborido.

Ya encabezó reuniones en la Facultad de Sociales de la UBA, en Mar Chiquita, Vicente López, La Plata, San Miguel, Tres de Febrero y Ramallo. El último fue el sábado en Arrecifes, donde afirmó: “Toda nuestra energía tiene que ser para confrontar con Milei, para cuidar a nuestra gente y defender la Argentina y sus valores”. El objetivo de estos plenarios es “conversar, debatir y organizar”, según los impulsores.

Además, el ministro se mostró hiperactivo durante el último fin de semana. Estuvo en la Plaza del Congreso en apoyo al festival por la agencia Télam y juntando firmas en una plaza de San Martín, en defensa de la universidad pública. Además, participó de la asamblea de la Facultad de Derecho de la UBA.

Katopodis es de los que creen que la pelea interna a cielo abierto perjudica al peronismo. Lo vivió durante el gobierno de Fernández y los resultados de esa experiencia, dice, están a la vista. Además de los plenarios que encabeza, el ministro bonaerense organiza reuniones cerradas en su municipio, San Martín, donde junta a dirigentes e intendentes de toda la provincia. En una de las últimas reuniones estuvo Máximo Kirchner junto a un reducido grupo de intendentes del conurbano.

En el último encuentro en Ramallo, Katopodis planteó que las reuniones son para “escucharse, organizarse y cargarse de esperanza para estar a la altura cuando llegue el día después de Milei”. También dijo que es necesario “reconstruir y poner de vuelta en valor un frente político, social y gremial que pueda plantarse y unir más fuerzas que la que tenemos”.

CON INFORMACION DE LETRA P.

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