Enemigos íntimos

Javier Milei y José Luis Espert viven una luna de miel después de años de un vínculo congelado, no exento de fuertes discusiones mediáticas. El Presidente empoderó al diputado liberal, que hoy integra el bloque del PRO, como su negociador estrella en el Congreso para avanzar con la ley ómnibus, mientras que relegó a muchos de quienes lo acompañaron durante la campaña, en su ascenso al poder.

Milei convocó el último lunes a Espert a la Quinta de Olivos, en una actividad que difundió la Oficina de Presidencia y que lo jerarquiza como su hombre de confianza en la Cámara baja. En su carácter de presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, una de las tres que conforma el plenario que discutió el paquete del Ejecutivo, el mandatario le hizo un pedido personal al legislador: que se asegurara de que su proyecto tuviera dictamen de mayoría al día siguiente. Espert cumplió.

A través de esa reunión, Milei relegó aún más al titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, que para los libertarios tuvo un papel deslucido como negociador del debate en comisiones. Tal es el disgusto del Presidente que primero le mandó a su asesor Santiago Caputo para que “agilizara” las conversaciones por la ley y luego eligió como negociador estrella a su exaliado Espert, pese a que integra otra fuerza política.

No los une sólo la ideología
Espert, "el profesor", como siempre lo apodó el Presidente, fue uno de sus primeros socios políticos. El vínculo entre ambos arrancó durante los últimos años del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Así lo describió a Letra P un dirigente que en ese momento tenía contacto con ambos: “Milei siempre lo reconocía a Espert como su mentor económico. Durante la ‘primavera K’ Espert era casi la única voz liberal en los medios y Milei le tenía cierta admiración. Pero luego, cuando Milei empezó a crecer, a Espert le molestó, porque él siempre lo trató como si fuera su jefe. Lo que los distanció no fue una discusión política, fue una guerra de egos”.
No fue la afinidad ideológica el único lazo en común. El mismo dirigente aseguró a Letra P que a los dos los financiaba -y los habría seguido apoyando al menos hasta la última campaña- la Fundación Friedrich Naumann para la Libertad (FNF). La organización alemana, que se dedica a impulsar las ideas liberales alrededor del mundo, fue anfitriona de varios encuentros en los que coincidieron ambos economistas argentinos.
Milei apoyó la decisión de Espert de lanzarse como candidato presidencial en 2019 por el Frente Despertar, pero la paz duró poco: el ahora Presidente dio el portazo al enterarse de la alianza de su socio con el ultranacionalista Alberto Asseff para conseguir la personería que habilitó su candidatura. Meses más tarde, con Espert derrotado en las urnas, los liberales se reconciliaron.

En 2021 se mostraron juntos en Mar del Plata para anunciar la creación del Frente Avanza Libertad, pero los coqueteos de Espert con Juntos por el Cambio (JxC) llevaron a que inscribieran por separado a sus fuerzas políticas. Espert compitió como diputado por la Provincia y Milei por la Ciudad. En ese entonces, Milei acusó a Espert de haber intentado sobornarlo con 300 mil dólares para bajar su candidatura.

Espert concretó en 2023 su voluntad de sumarse a las filas de Horacio Rodríguez Larreta. Derrotado en la interna de JxC contra Patricia Bullrich, el liberal mantuvo el silencio hasta el ballotage de Milei contra Sergio Massa. Ahí expresó su apoyo a su exsocio político, quien le valoró el gesto.

Ya con la gestión libertaria en curso, Espert fue designado al frente de la comisión de Presupuesto en Diputados, un área clave para el Gobierno. Milei lo recibió en la Casa Rosada y luego, desde su cuenta de Twitter, saludó al diputado: “Profe, bienvenido a las Fuerzas del Cielo”.

El grupo de desplazados
La reconciliación con Espert no cayó bien entre los libertarios que acompañaron a Milei en la campaña presidencial y hoy lo miran con recelo, aunque entienden que el Presidente lo necesita para el debate en el Congreso. La reconciliación se da, además, en un contexto en el que una delegación de figuras cercanas a Milei en la campaña quedó relegada de los espacios más importantes del Gobierno.

Ni el legislador porteño Ramiro Marra ni la diputada Carolina Piparo, que acompañaron al libertario durante todo el 2023, recibieron un cargo. Ella sigue furiosa por el desplante que le hicieron al confirmarla como titular de la Anses y luego dar marcha atrás.

Entre los liberales también señalan que la diputada Marcela Pagano no quiso integrar las comisiones para debatir la ley ómnibus ya que le habrían prometido la presidencia que al final le dieron -precisamente- a Espert.

La vicepresidenta Victoria Villarruel, la aliada principal de Milei en los últimos años, también fue desplazada. Una razzia de los propios que crece al calor de las nuevas (y viejas) alianzas del mandatario libertario.

En el camino quedaron incluso integrantes del team económico del cual el libertario se jactaba en campaña. Mientras se llenaban los casilleros del gobierno, antes de la asunción, se bajó Emilio Ocampo, el ideólogo del plan dolarizador de Milei que iba a presidir el Banco Central con el objetivo de cerrarlo. Otro que también se despidió fue Carlos Rodríguez, profesor del CEMA, cuando el nombre de Toto Caputo comenzó a sonar para el Ministerio de Economía.

Con informacion de LEtra P.