Unidad aunque duela

Axel Kicillof quiere salir por arriba del laberinto que dibuja el llamado a elecciones para elegir conducciones en el PJ y en la versión bonaerense del partido que comanda Máximo Kirchner. El gobernador propone una “síntesis” entre las tribus que se traduzca en una lista de unidad, al tiempo que esquiva ponerse al frente de la institución.

“Con la responsabilidad que como gobernador, no creo que esté pensándolo como algo necesario”, dice a Letra P un funcionario del gobierno bonaerense ante la consulta sobre una posible candidatura del mandatario para presidir el PJ.
 
La misma fuente indicó que en La Plata aspiran a encontrar una “síntesis”; que “terminen yendo todos unidos en una sola lista, sin competencia”.

Contra Javier Milei
La interna, en cualquiera de sus versiones -para elegir conducción en el PJ o para dirimir el armado de las listas legislativas del año próximo-, pone en un lugar incómodo al gobernador, quien pretende construir una alternativa amplia del peronismo para enfrentar al presidente Javier Milei. Una compulsa al interior del partido lo obligaría a elegir uno u otro sector.
Sin embargo, aunque prefiere “ahorrarse una interna”, Kicillof no puede ser ajeno a las discusiones que se dan en el interior del partido si quiere liderar al peronismo. En el entorno del gobernador reconocen que tiene un rol que cumplir en ese sentido, afirman que dialoga del tema con intendentes, ministros y otros dirigentes, pero prefiere que esas charlas no trasciendan.
Kicillof se concentra en batallar contra Milei, consolidar su gestión y construir una alternativa nacional lo más amplia posible. “De eso hay que hablar”, repiten en La Plata.

No obstante, algunos sectores del peronismo no están tan seguros de que una lista de unidad sea la mejor opción. Parte de la dirigencia bonaerense ya se está moviendo para ver en qué situación están los padrones del partido, hablan de afiliaciones y esperan la convocatoria a una reunión del consejo del PJ provincial por parte de Kirchner.

Hasta el cierre de esta nota, no había llamado formal ni fecha tentativa, pese a que, al convocar a elecciones, dirigentes del entorno del hijo de Cristina Fernández de Kirchner hicieron trascender que la reunión se realizaría esta semana.

“Axel habló de empezar a construir una alternativa nacional y popular, que incluya a todos, para enfrentar al gobierno de Milei. El camino es ese, no detenernos en peleas internas”, resume ante Letra P un funcionario del gabinete.

Por eso Kicillof evitó durante el cierre del plenario de la militancia, el sábado pasado en Florencio Varela, hacer cualquier referencia a la interna bonaerense o a la elección del PJ, pese a que una fuente cercana al gobernado reconoce que “no gustó” la ausencia de La Cámpora, que ni siquiera mandó a quienes integran el gabinete. “Nos hubiera gustado que participaran porque con el acto se buscó sumar voluntades y músculo a una alternativa que empieza a ser necesario construir”, afirmó.

Pese al todos contra todos en el peronismo, el gobernador se mantiene firme en su postura de no entrar en la disputa.

Cerca del gobernador miran con atención las críticas hechas por algunos dirigentes sobre los modos de conducción de CFK, pero se despegan. Avisan que “son dirigentes con peso propio” a los que nadie les ordena qué tienen que decir. “De nosotros nunca va a salir nada en este aspecto porque creemos que lo que está haciendo el gobierno nacional es grave y nosotros lo que tenemos que hacer es mostrarnos como una alternativa seria”, resumió la fuente.

CON INFORMACION DE LETRA P.