Patricia Bullrich le declara la guerra total a Mauricio Macri

La ministra Patricia Bullrich le declaró la guerra total al expresidente Mauricio Macri. La carta firmada por figuras del PRO contra el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, enfrentado con Javier Milei por los fondos, es la muestra más clara. Pintada de violeta furioso, la titular de Seguridad dijo que “el exceso de prudencia” del gobierno de Cambiemos se pagó con crisis.

Bullrich, que regresa al país de la cumbre del CPAC en los Estados Unidos, se dedicó desde el sábado a juntar firmas para la carta en donde iba a criticar abiertamente a Torres y al expresidente para mostrarse como una aliada de Milei. La yapa de la apuesta es la fractura del PRO, cuya interna partidaria quedó expuesta en momentos en los que el macrismo se encaminaba a una lista de unidad.
 
Los lugartenientes de Mauricio Macri no firmaron
La crítica al ingeniero fue tal que dirigentes del riñón del expresidente que comulgan con Bullrich no la firmaron. El caso más emblemático fue el del diputado Hernán Lombardi. “Hernán es hombre de Mauricio, nunca va a firmar algo que vaya contra él”, dijo a Letra P una fuente al tanto de la situación. Es que en el primer párrafo del documento la ministra de Seguridad ya disparó contra el fundador del macrismo.

“Los abajo firmantes, dirigentes y militantes del PRO y de fuerzas aliadas, compartimos de diversas maneras la experiencia de gobierno 2015-2019. Las manifestaciones públicas de nuestros principales dirigentes confirman un diagnóstico: se avanzó demasiado lentamente y con exagerada prudencia y eso se pagó con una crisis que impidió la continuidad del cambio”, comenzó la misiva.

El armado de la carta comenzó luego de que Bullrich criticara a Torres vía Twitter. Antes de dar a conocer su postura en la red social, la ministra de Seguridad le dijo al gobernador que intentaría ver si había chances de encauzar el diálogo con Milei. Eso no sucedió y abiertamente le pidió que ajuste las cuentas provinciales.
La publicación del documento, además, se da en la previa a la reunión que tendrán los gobernadores de Juntos por el Cambio (JxC) con el bloque del PRO, conducido por Cristian Ritondo. El exministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires tampoco firmó la carta por los mismos motivos que Lombardi. A él se le sumaron sus pares de la Cámara baja María Eugenia Vidal y Diego Santilli.

Las ausencias y sorpresas en la carta PRO
Entre los firmantes que causaron sorpresa está la vicegobernadora de Mendoza, Hebe Casado. Se encargaron de remarcar que su acompañamiento fue a título personal y que no tiene nada que ver con la postura del gobernador Alfredo Cornejo. Otra rúbrica que llamó la atención fue la de Eduardo Macchiavelli, exsecretario de Coordinación Federal y exarmador del exjefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta.

Macchiavelli, según pudo reconstruir este portal, estampó su firma en el documento porque está convencido de que debe bajarse el nivel de enfrentamiento entre Milei y Torres. “En la Ciudad gobernamos 12 años con el kirchnerismo y nunca se respondió de esa forma. Aún cuando nos hicieron cosas 1.000 veces peores”, fue la respuesta que el exfuncionario le dio a otros larretistas sorprendidos por el apoyo en la carta.

La chance después del ataque de Patricia Bullrich
Macri, que difícilmente recomponga su relación con Bullrich, encontró una veta positiva en la carta: demostró que no hay funcionarios “suyos” en el Gobierno. Las figuras del PRO que están en el ejecutivo y la firmaron, con Federico Pinedo como caso emblemático, demostraron que están en la administración de Milei por la ministra de Seguridad y no por el expresidente.

“Nunca pidió cargos y con esto quedó más que claro”, analizó un integrante de la mesa chica del exmandatario.

Si la semana pasada Macri puso en el freezer el acuerdo parlamentario con La Libertad Avanza (LLA), la avanzada de Bullrich terminó por enterrarlo. Pero la apuesta de la ministra de Seguridad es otra: si no puede controlar a las figuras del PRO, quiere que la mayoría se encuadre detrás de ella con una lealtad total. Es decir, quiere fracturar el partido al que se sumó formalmente en 2018, cuando fusionó a Unión por Todos con el macrismo.

CON INFORMACION DE LETRA P.